La ciudad de la suerte

Escrito por Jaime Tonda Martínez, 2-11-2015.

Estaba pensando en proponer cambiar el lema de nuestra ciudad: ‘Ciudad minera y flamenca’ (a mí me gusta más el anterior: ‘Ciudad minera y cantaora’, qué se le va a hacer) por el de ‘Ciudad de la suerte’ o algo así como ‘La ciudad de la suerte y el flamenco’ o, también, por ejemplo ‘Donde la suerte y el flamenco se unen’. Quizás alguien se pregunte el porqué de ‘la suerte’.

En esta ciudad lo que no es normal (emulando a la Secun de la serie Gym Tony) es que no nos toque más la lotería o los sorteos de la ONCE y Prodiecu, hecho éste que tendría que ser habitual por estas tierras, ya que si hacemos caso al dicho popular de que cuando alguien pisa una mierda, es que va a tener suerte, estamos en una ciudad en la que las oportunidades de que eso ocurra son extraordinariamente abundantes.

Tenemos una ciudad donde no se puede caminar mirando simplemente al frente, donde nuestras calles son como pistas de obstáculos, donde  tenemos que ir vigilando siempre con la mirada baja, donde asientan nuestras pisadas para evitar (quizás sea este el problema: que lo evitamos), pisar una de la muchas deposiciones de perros que tenemos generosamente repartidas por las aceras y calzadas de nuestra suertuda ciudad, siembra en la que los propietarios de canes ponen especial ahínco, salvo contadas excepciones, que las hay.

Porque entiendo que los propietarios de estos animales han de sacarlos a hacer sus necesidades fuera de casa. No cabe otra. ¿Y a dónde llevamos al perrito?, no es cuestión de ponerlo a hacer sus cosas en nuestra puerta ¡ni pensarlo!. Además sería egoísta por nuestra parte quedarnos con toda la suerte. Pues entonces lo llevamos a la calle del vecino, concretamente a su acera. Claro que si en la calle vecina también viven propietarios de perros y, como digo, hacen lo mismo, los animales de nuestros vecinos vienen a cagarse en la nuestra, a modo de intercambio de excrementos, o bien mirado, de oportunidades de tener suerte.

Pero existe una corriente de comportamiento (menos mal que no hay muchos seguidores) que cuando su mascota hace sus necesidades… ¡las recogen!, en un acto insolidario con el resto de sus conciudadanos. Esperemos que este comportamiento nada altruista, no vaya en aumento y nos priven de la ración de mierda y suerte que nos corresponde a cada uno de los unionenses.

Ahora vamos a cambiar esto. Le recomiendo que camine por nuestras calles mirando al frente, sin mirar al suelo. ¡Sea atrevido, osado, arriésguese, haga una locura!. Seguro que el azar le favorece y pisa alguna mierda, e inmediatamente vaya a por su boleto del sorteo diario, que seguro que le toca.

Si es así, enhorabuena, pero no se lo guarde para vd. y anime a sus vecinos a imitarle, e incluso me atrevo a pedirle que convoque a los medios para que el nombre de nuestra ciudad La Unión y la suerte vayan ligados en adelante a nivel nacional (como la población leridana de Sort con la Lotería Nacional), y por supuesto, agradézcalo a esos abnegados conciudadanos que con los paseos diarios y a las cagadas, también diarias, de sus mascotas, han ido creando las condiciones para que su fortuna cambiase. ¡Que la suerte le acompañe!

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