De los "indicios constantes" de unos a "las invenciones" de otros

Escrito por Carlos Illán Ruiz - 21DEhoy agenCYA. 28 de febrero de 2022, LUNES.

El juicio por la desparición/muerte de María Dolores Sandoval ha acogido, dentro de su primer capítulo, la exposición al jurado por parte de las acusaciones y de la defensa de cuáles serán su línea de actuación en la vista oral, presentándose ambas partes dos situaciones totalmente opuestas. El fiscal resalta que se encontró un rastro de sangre donde el encausado dijo, en un primer momento, que había ocultado el cuerpo: "Buscamos justicia, no venganza", afirma. Por su parte, la defensa afirma que su cliente no mató a su pareja y que no existen cuerpo, arma o pruebas que lo involucren: "No se puede condenar a nadie por un hecho inventado", aseveró.

El fiscal, Fulgencio Pérez, ha reconocido que no existen pruebas, "pero sí indicios constantes y un amplio material" para que estemos convencidos de que A.S.M. fue el autor de la muerte de su pareja, "con la que mantenía una relación de dominación hasta el punto de aislarla paulatinamente de su familia y de que no podía abandonar sola la casa, pese lo que logró huir en algún momento", expuso. Afirma que se calcula que entre el 21 y el 22 de octubre tuvo lugar el crimen, "y no hizo nada en pos de encontrarla, ¿para qué?, si era quien la había matado", ha dicho, además de decir que el encausado apenas ha colaborado, ha ofrecido manifestaciones dispares y contradictorias, además de calificarlo como autor de "un acto de crueldad, pues ha ocasionado algo muy duro para otras personas, como que no se tenga un lugar donde llorar a una persona fallecida". El fiscal ha reconocido que no puede demostrar cómo fue la muerte, "pues no tenemos el cuerpo", pero sí que el procesado es el autor de un homicidio. Después sí ha recordado que A.S.M. declaró "con todo lujo de detalles" que cogió el cuerpo y lo descuartizó, introduciéndolo en un lugar "donde sí se encontró un rastro de sangre". Concluyó diciendo: "No queremos venganza, sino justicia", apuntando que merecería 25 años por asesinato en lugar de homicidio.

La acusación particular (Miguel Juan Cobacho López) se adherió a las manifestaciones del fiscal, añadiendo que lo que se juzga estos días "es fruto de un largo proceso de investigación llevada a cabo por policía y médicos forenses, que ha generado, junto a los documentos, indicios que entendemos más que suficientes para la condena". Para el representante de familia, el himbre descuartizó y desmembró a la mujer en el interior en la casa, en un primer momento, y en el patio, después. Luego introdujo trozos en bolsas de basura que guardó en un arcó durante meses, hasta que los sacó para echarlos en dos contenedores. El letrado ha lanzado al jurado una pregunta para reforzar su convición: "Si en una buena relación de pareja, uno de ellos llega y se encuentra en el domicilio a su compañero tumbado, incosciente y con un vómito, ¿no sería lógico llamar al 1-1-2? En este caso no hubo ni una llamada a emergencias ni a los familiares".

Por su parte, para la defensa, A.S.M. no es el autor de la muerte de María Dolores Sandoval Ruiz "ni existen pruebas ni cuerpo ni armas..., además de relatos que no se sostienen. Tampoco se le puede relacionar con las pruebas forenses, es inocente". José Ramírez de Arellano Sanchez se dirigió al jurado diciendo que están en sala "para valorar si se han cometido o no esos delitos, no para valorar los convencimientos o sentimientos de la acusación sobre la conducta del acusado". También dijo que este asunto surge por una desapareción, "y demostraremos que fue una auténtica desaparición, que luego concluye la policía en que había fallecido por una serie de pruebas, como extractos bancarios o medicación. ¿Es suficiente o no ese material para dar por fallecida a la mujer? Eso se puede debatir, pero lo que se inventa fiscal y acusación particular es que muere por homicidio cuando no hay prueba alguna. No podemos saber si murió de forma natural o por alguna de sus numerosas patologías. No hay pruebas de que le causara la muerte otra persona y no se puede condenar a nadie por un hecho no demostrado", aseveró. También apuntó que tampoco se puede condenar las contradicciones en las manifestaciones, "pues sirve para darle más o menos credibilidad a una u otra versión, pero no prueba nada la causa de la muerte de esta persona". Sí ha dicho que A.S.M. sí reconoce que la encontró fallecida y la descuartizó, pero los forenses dicen que es "inverosímil" lo que manifestó, "vamos, que se lo ha inventado".

Fiscalía y acusación particular piden 15 años de cárcel por el delito de homicidio con los agravantes de parentesco y machismo y seis meses por el delito de profanación de cadáver. Como responsabilidad civil se piden 141.000 euros para los tres hijos de la víctima y 750.000 para los seis hermanos de ella. También se solicitan intereses y costas. La defensa pide la absolución de su cliente