'D. Fernando Garrido Tortosa: padre del cooperativismo español'

Escrito por Cándido Román Cervantes. Historiador Económico. Director Cátedra de Economía Social y Cooperativa. Universidad de La Laguna. 27-7-2022.

De vuelta a casa, crucé el paso de peatones que une la Alameda de San Antón en dirección al Colegio Santa Joaquina de Vedruna (Las Carmelitas) cuando sin darme cuenta !pisé” una lápida de color oscuro casi ilegible. Me detuve, aguceé mi vista y no sin mucha dificultad pude leer: 'Fernando Garrido Tortosa, 1821-1883. Escritor y político cartagenero, Republicano, Socialista y Masón, Diputado a Cortes entre 1860- 1873. En 1920 dio nombre a esta Alameda. Cartagena 28 de febrero de 2015'.

No quiero detenerme en relatar la intensa actividad política, cultural, artística y social que nuestro conciudadano tuvo a lo largo de su vida. Todo ello, pueden ustedes encontrarlo en Wikipedia o en Google Scholar. Es de todos sabido la temprana inclinación de D. Fernando Garrido Tortosa por conocer los avances que desde el socialismo utópico se estaban gestando en Francia. Entre marzo y mayo de 1848, publicó La Organización del Trabajo, periódico que aparecía dos veces por semana para la difusión de las teorías socialistas de Proudhon, Saint-Simon y especialmente de Louis Blanc y Fourier. El eje central de su pensamiento político se dirigía en conseguir la mejora de las condiciones de vida de las clases trabajadoras, en un periodo, mediados del siglo XIX caracterizado por las profundas transformaciones que la Revolución Industrial estaba impactando en las relaciones laborales de toda Europa.

Es precisamente esta inquietud en conocer otras formas de organizar la economía y las empresas, alternativa a las sociedades mercantiles lo que le llevó a interesarse por lo que estaba aconteciendo en Gran Bretaña en una pequeña localidad cercana a la ciudad británica de Manchester. En el pueblo de Rochdale en 1844 se estaban dando los primeros pasos para la creación de la primera cooperativa de consumo del mundo a iniciativa de 28 personas, 27 hombres y 1 mujer (abogados, escritores y tejedores). De ese modo, al calor de las dificultades de las clases trabajadoras industriales nació un modelo de hacer empresa que hoy en día y según una reciente estimación de las Naciones Unidas de 2022, engloba a más de 3 millones de empresas cooperativas y 279 millones de personas lo que significa casi el 10 % de la población activa a nivel mundial.

D. Fernando Garrido Tortosa, se exilio a Francia en 1850 se estableció en París, a finales de 1851, fijó su residencia en Londres. Allí conoció a los exiliados de la revolución europea de 1848: Ledru-Rollin, Mazzini y otros. Con ellos formó el Comité Central Democrático Europeo, en el cual Fernando Garrido representó a España. Fue durante estos años cuando D. Fernando comprendió el funcionamiento de las sociedades cooperativas como alternativa a la empresa capitalista tradicional en donde la honestidad, la confianza mutua, la aconfesionalidad, la no discriminación, así como la profundización de los valores humanos, lo convertían como un modelo para dignificar la vida de los trabajadores industriales de España.

Suele ser considerado el primer teórico de esta corriente en nuestro país, por su activa labor en la prensa democrático-republicana y obrerista. Aunó los conocimientos adquiridos a través de sus lecturas con sus experiencias directas, como la que le llevó a conocer de primera mano Rochdale Equitable Pioneers Society. Fernando Garrido ejerció una influencia notable entre las organizaciones obreras de Cataluña e impulsó numerosas cooperativas, sobre todo de consumo.

No era fácil convencer a las clases trabajadoras que este modelo de gestión que se basa en valores exclusivamente humanos, la confianza y la honestidad, es una alternativa. Los obreros industriales la mayoría analfabetos, vieron al principio esta forma de gestionar colectivamente los recursos con desconfianza. La valor pedagógica y de difusión de estas ideas las plasmó en el libro La Cooperación publicado en 1879, dedicado a las sociedades cooperativas de la provincia de Barcelona y con el subtítulo: “Sobre sociedades cooperativas de consumo de producción en Inglaterra y otros países y especialmente en Cataluña”.

En estos momentos en que debido a la celebración del 150 aniversario del Cantón de Cartagena en 2023, se está preparando un Congreso Internacional de máximo interés incentivado por historiadores, por los cronistas oficiales de la ciudad de Cartagena y especialistas de la universidades de la Politécnica de Cartagena y Murcia, con el título “La Revolución Cantonal de Cartagena 1873-2023. Memoria, Sociedad y Discurso”, es cuando la reivindicación de la figura de nuestro paisano adquiere una mayor justificación.

Levantémosle del suelo y hagámosle el honor que se merece, como cualquier otro ciudadano ilustre cartagenero, ubicándole en algún lugar de la ciudad con mayor visibilidad y relevancia. D. Fernando Garrido Tortosa, se lo merece.

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